Son dos de los recitales que figuran fácil entre los más aguardados por el público local en los últimos años. Uno es un regreso y otro es un debut, y ambos ya tienen un punto en común: la velocidad con que se han despachado sus entradas en sus primeros días de venta.
Bon Jovi y Rush vienen en octubre al Estadio Nacional (el primero estará el 1 de ese mes, mientras que el trío canadiense lo hará el 17) y sus fans se han volcado de manera generosa a adquirir sus entradas.
Según informan en la productora Time for fun (T4F), organizadores de ambas citas, los hombres de Bad medicine ya despacharon 28 mil tickets desde que salieron a la venta el pasado domingo 8. O sea, ya está asegurada casi la mitad de toda la capacidad del reducto de Ñuñoa (que para estos shows espera a un público estimado de 50 mil personas).
El caso de Rush también arroja cifras abultadas. Sólo ayer se inició la preventa para clientes de una compañía telefónica y se adquirieron 10 mil localidades. El furor es comprensible: se trata de la primera visita del conjunto a Chile, donde goza de un amplio culto nacido en los 80 y que se ha extendido a espaldas de los medios oficiales, donde sólo lucen una rotación moderada. Además, la banda viene a mostrar la totalidad de Moving pictures (1981), su trabajo más popular.
En el caso de Bon Jovi, la última vez que pasaron por Santiago fue hace ya 17 años, en 1993. Luego -aunque la banda nunca retomó la apabullante popularidad que tuvo a fines de los 80- sí mantuvieron una admirable vigencia amparada en discos de fina factura y en un estatus que los alzó como uno de los espectáculos en vivo más rentables de la última década.
Para ambos eventos las entradas están a la venta en los puntos Ticketmaster. Para el recital de Bon Jovi, ayer comenzó la venta general de entradas. En el caso de Rush, ayer sólo despegó la preventa con 20% de descuento para clientes Entel. El 22 se inicia la venta para todo público.
FUENTE. www.latercera.com